Los niños nacen, porque los trae una cigüeña desde París.

Hola a todos, queridos hamijos y hamijas de la harina cerebral, hoy vengo para arrojar luz sobre un mito, que lleva atormentando a la gente desde hace un montón de generaciones, y que es nada más ni nada menos que el siguiente: Los niños nacen por que se folla. Eso es una mentira tremenda, porque la reproducción no es tal cual nos han hecho creer, si no que es de otra manera que sólo yo y los mandamases malvados que dominan el mundo conocemos. Ahora, despues de largos años, el secreto es desvelado por fin...

Antes de la Segunda Guerra Mundial, el milagro de la birra, perdón de la vida en los seres humanos, se producía por todo eso que nos contaron en clase de Conocimiento del Miedo, que diga del Medio, y que era nada más ni nada menos que toda aquella historia de los óvulos, espermatozoides y demás, y así hubiera seguido siendo, si Hitler no hubiera cambiado todo aquello, lo cual hizo de la siguiente manera y por las siguientes razones:

- Hitler no sólo era la encarnación del mal y del hijoputismo llevado a los extremos, si que no que tambien era un gran conocedor de la magia negra invisible que puede mover los entresijos del mundo, por lo cual no dudó en usarla siempre que pudó, o mejor dicho, está se dejó ya que la magia negra que lo puede mover todo no es dominable por una sola persona eternamente, así que el sujeto que consiga dominarla sólo la poseerá durante un tiempo, pero bueno, eso ahora no nos incumbe que no quiero abrumaros con mis conocimientos sobre las artes oscuras.
El caso es, que Hitler quería que no naciesen ni más gente de las razas que no le molaban, ni que naciera más gente que pudiera ser contraria a su pensamiento, así que creo un sortilegio de magia negra invisible que impidiese nacer a este tipo de gente. Este sortilegio funcionó, y durante un corto periodo de tiempo, dejaron de nacer personas que podía molestarle, aunque claro, la magia negra invisible que puede mover los entresijos del mundo, es voluble, así que más que dejar de funcionar el sortilegio, este se volvió contra todo el mundo, por lo cual la gente pudo montárselo a pelo sin temer a los embarazos, ya que el sortilegio impedía nacieran nuevos seres humanos. De todo esto, se dio cuenta "La Hermandad Mágica de Las Movidas Estelares", una agrupación de magos buenos, que puso solución al sortilegio de la única manera que este caso permitía: Solucionarlo de manera mágica. Antes que nada, para entender ciertas cosas de todo esto, hay que decir que la sede mundial de los magos estaba en París, así que toda esta historia se desarrolló en dicha ciudad, ya que se trataba de un asunto de importancia mundial.
Bien, pues el primer paso del plan mágico para acabar con el sortilegio Hitleriano, consistía en crear una fuente inagotable de la vida, la cual la hicieron en los subterraneos inencontrables de París, para que ningún garrulo fuera a mear en ella. Una vez creada esta fuente, crearon un hilo de redes mágicas que observaran en todo momento constante, si se daban las condiciones que anteriormente se necesitaban para que nacieran churumbeles (vamos lo del óvulo y demás), a las cuales llamaron "La Cigüeña", en homejane al mote que tenía la matrona del pueblo del jefazo de los magos, un tal Acriet Maguinet, que se crió por cierto en España, en un pueblo ya desaparecido que se llamaba Chinchilla de Los Corcoñucos. El caso es, que cuando una gota de agua mágica toca el sitio dónde debería producirse el milagro de la vida, este se produce, así que la misión de la red de hilos mágicos llamada "La Cigüeña", es llevar una gota de ese agua invisible a todo útero o probeta dónde se de las condiciones para que un nuevo alumbramiento ocurra.

Bueno, pues gracias a esta sencilla explicación, ya sabeis que los niños vienen de París y los trae "La Cigüeña", así que dejad ya de contar truculentas historias a vuestros hijos sobre el sexo y la reproducción, que cada vez la gente está más salida y es más guarricerda con edades más tempranas. Cómo esto siga así, el Todopoderoso (si si, ese que la gente usa cómo water) castigará vuestras blasfemias con una lluvia de gapos celestiales. Amén