Wednesday, February 07, 2007

Historia Épica de Manolillo Le Bigot y el Malvado Hechicero Trabauba.3ª Parte

Y cómo ibamos diciendo, Manolillo despertó en la suite de un hotel de cinco estrellas en Miami, con una resaca del quince. Se levantó dolorido de la cama de matrimonio que allí había, y fue derecho al baño a lavarse la cara y a ver si bebía un poco de agua, y cuando se miró en el espejo casí le da un soponcio. El rostro que le mostraba el espejo, no era el de aquél chico con sobrepeso y principio de calvicie que caracterizaba a Manolillo, si no que se trataba del rostro de un guaperas de esos en plan cantante "latino", de lo que venden minoyes y minoyes de discos por todo el mundo y que le tienen arrebatado el corazón a las nenas (bueno, más bien a todas las nenas aficcionadas al pachangueo, que ciertamente son muchas). Manolillo, no pudo dejar de sospechar de esto, pues si bien sabía o más bien parecía, que la historia de Trabauba había sido un sueño muy real, aquello del cantante de pachangueo pues cómo que no le terminaba de cuadrar. Manolillo sabía todo sobre ese cantante, pero tenía la sensación de no haber vivido en persona sus recuerdos, cómo si de buenas a primeras le hubieran hecho caer dentro de ese cuerpo y esa vida. ¿Y si Trabauba era real, y no le había vencido, si no que se la había jugado de alguna manera mágica?, pues lo dudaba mucho, pues si Trabauba le había vencido, a buen seguro que lo hubiese mandado al cuerpo de alguien a punto de morir en la silla eléctrica o algo peor, que putadas en el mundo hay muchas. Manolillo, mientras paseaba por la habitación del famosísimo cantante Manu Costa, iba observando los objetos que delataban que este tío era un aficcionado a lo de "living la vida loca", pues allí había claras señales de que la noche pasada, había tenido caña burra con más de una mujer al menos, y de que allí se había consumido bebida cara y cocaína, aunque esto último (la coca), Manolillo no sabía si lo había consumido el cantante o alguna de las mujeres que allí habían estado. A Manolillo, todo le parecía cada vez más raro, así que se tumbó en la cama para pensar y fue entonces cuando se dió cuenta de todo y dijo:-¡Oh mierda!, ya se que es lo que está pasando aquí...

-¡Manu tio!, menos mal, pensabamos ya que te quedarías así para siempre, es más, es que casi la palmas...
Manu abrió los ojos y vio la típica habitación de hospital, blanca y aséptica. A su lado estaba Juan, un amigo que había venido a verle a la habitación. Lo último que recordaba era que iba con prisas a recoger a su hijo, y que tropezó con las escaleras a la altura del piso inferior a su casa (el ascensor no funcionaba). Despues de tropezar, vino la confusión, un golpe seco, dolor intenso durante segundos y volverse todo negro, para luego soñar que era un tipo mezquino y gordo que vivía aventuras mágicas, que a su vez se despertaba en el cuerpo de un cantante en plan latin lover. Surrealista desde luego...
-Juan, no te vas a creer lo que he soñado, parecía una historia cómo las que escribe en su blog el colgado ese de Guadalajara, el amigo del Txus, joder, el que tocaba con él en el grupo...
- ¿Antonio? ¿El Carman?- dijo Juan.
- Si, ese mismo.
- Pues ya se lo contarás para que lo escriba en su blog, que me tengo que ir ya. Menos mal que has salido de esta Manu, porque habíamos perdido la esperanza. Ahora llamo a tu mujer y a tu chico para que vengan a verte. Hasta luego.

Manu quedó solo en la habitación, bueno, él y las escayolas que lo enfundaban, eso sin añadir que el cuerpo le dolía cómo si le hubieran dado veinte palizas. Echando un vistazo a su alrededor, vió en una esquina una mesa con un vaso vacio y un brick de zumo al lado. La marca del zumo era Tragauvas, un zumo de frutas del bosque, que repudiaba por que en su juventud se agarró una borrachera muy mala tomando vodka mezclado con este zumo. Cosas curiosas que tiene la mente humana, pues en vez odiar el vodka o la mezcla de este con el susodicho zumo, a lo que le cogió asco fue al zumo en cuestión. Sin embargo, tenía mucha sed y en ese momento lo que más deseaba era que el contenido de ese brick de zumo (si es que aún quedaba algo todavía), llegara hasta él y justo cuando buscaba algún modo de llamar a una enfermera...¡Zas!, el contenido del zumo se estrelló contra su cara poniéndole perdido, a la vez que el brick de zumo empezó a desintegrarse en la mesa en la que estaba colocado...

Y aún hay más, pero eso para la siguiente y última parte...

7 comments:

Anonymous said...

Hombreeeee que alegria tenemos tercera parte, la segunda ya me la sabia casi de memoria....jejeje
Click por hoy.
Saludos de tu amigo Conejín.

Anonymous said...

Ya toy aquiiii....hola Carman.
Saluditos de tu amigo Conejín·<;0)

Anonymous said...

Hola Carman, está lloviendo, pero yo no falto a mi cita.
saluditos de tu amigo Conejín ·<;0)

RUBIE said...

Hola carman ya todo ok.
saludos de tu amigo Conejín ·<;0)

RUBIE said...

Hola Carman, otro lunes más al saco ya falta menos para las vacaciones.
Saluditos de tu amiguito Conejín ·<;0)

Anonymous said...

Hola Carman, gracias por felicitarme.
Saludos de tu amigo Conejín.Ok por hoy.

Anonymous said...

Hola Carman ya estoy por aqui en mi visita diaria. Mision cumplida y hasta mañana.
Saluditos de tu amigo Conejín ·<;0)